Reseña Cine: 'Phantasm' (1979)

Tras dos películas de corte juvenil ('Jim, the World's Greatest' y 'Kenny & Company') sin demasiado éxito, Don Coscarelli se pasó al terror con esta cinta de 1979 cuyo título, palabra de origen francés, sacó de las obras de Edgar Allan Poe, uno de sus autores favoritos. 

Durante su adolescencia, tuvo una pesadilla que sería el germen de su obra. En ella corría por unos interminables pasillos de mármol perseguido por unas esferas cromadas que volaban a gran velocidad con el fin de atravesar su cráneo con unas afiladas agujas.

Coscarelli se encerró durante dos semanas en una cabaña a las afueras de Los Ángeles para escribir el guion y comenzó el rodaje con un equipo profesional. Varios retrasos iniciales (quizás por su falta de experiencia) le llevaron finalmente a contar con un grupo amateur formado por amigos y conocidos, grabando solo los fines de semana y reduciendo los costes de producción al máximo. La leyenda urbana cuenta que alquilaba el equipo de filmación los viernes con el objetivo de tener unos días "gratis" al tener que devolverlo los lunes.

El resultado fue una serie B que con el paso de los años se ha convertido en una película de culto, a pesar de que en su momento tuvo cierto éxito en taquilla, dando lugar a una tetralogía (ampliada hace cuatro años a una quinta entrega, 'Phantasm: Ravager', que supuso un agridulce punto y final a la saga). Aunque sin duda, esta cinta será recordada por los fans del terror por ser la primera aparición de uno de los villanos más icónicos del género: el imponente The Tall Man (interpretado por el veterano actor Angus Scrimm).

La historia se centra en dos hermanos huérfanos: el jovencísimo Mike (interpretado por A. Michael Baldwin) y el cabeza de familia, Jody (Bill Thornbury). Ambos asisten al funeral de un amigo cercano que ha muerto en extrañas circunstancias en lo que aparentemente parece un suicidio.

Tras el velatorio, Mike convencido de que su amigo fue asesinado, observa como el lúgubre dueño de la funeraria (Angus Scrimm) carga con una fuerza sobrehumana el ataúd y se lo lleva con el propósito de utilizar su cadáver para algún plan secreto de lo más macabro.

Junto con el hilarante Reggie (Reggie Bannister, secundario que posteriormente protagonizará el resto de las entregas de la saga), Mike y Jody descubrirán que el enterrador, The Tall Man, es una entidad sobrenatural que utiliza los cuerpos muertos para convertirlos en esclavos enanos que le ayudarán en un terrible plan que se irá desvelando poco a poco. 

Para el disfrute del espectador, el terrible villano de 'Phantasm' contará con todo un ejército de pequeños siervos y, sobre todo, con las míticas bolas cromadas provistas de cuchillas, que serán sus centinelas a lo largo de la película.

De gran ambientación y con un estilo onírico en el que espectador nunca sabe lo que es real o un sueño, es un entretenido ejercicio que mezcla casi a la perfección terror, fantasía y ciencia ficción.

Frase memorable: "Chicooo!" (The Tall Man a Mike) 

Lo mejor: El personaje de The Tall Man y el efecto especial de las esferas.

Lo peor: Su bajo presupuesto y el paso de los años juegan en su contra.

Nota final: 8.